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La presión arterial es la fuerza que ejerce la sangre contra las paredes de las arterias. Cuando se mide la presión arterial, se registran dos números:
Presión sistólica. Es el valor más alto. Se refiere a la presión más alta dentro de la arteria. Ocurre cuando el corazón se contrae y bombea sangre a todo el cuerpo.
Presión diastólica. Es el valor más bajo. Se refiere a la presión más baja dentro de la arteria. Ocurre cuando el corazón se relaja y se llena de sangre.
Por ejemplo, si la presión arterial de un niño es de 110/70 mmHg, 110 es la presión arterial sistólica y 70 es la presión arterial diastólica.
Tener presión arterial alta (hipertensión) quiere decir que la presión dentro de las arterias es demasiado alta. Esta presión mayor puede dañar las arterias y hacer que el corazón se esfuerce más.
Si la presión es alta cuando el corazón se contrae, la presión sistólica será alta.
Si la presión es alta cuando el corazón se relaja, la presión diastólica será alta.
Es posible que la presión sistólica, la presión diastólica o ambas sean altas.
Son muchos los factores que afectan la presión arterial. Por ejemplo:
El momento del día. La presión arterial cambia durante el día.
Actividad física. La presión arterial suele ser más alta durante el ejercicio y después de hacer ejercicios.
Emociones. Sentirse enojado, asustado o feliz puede afectar la presión arterial. Estar ansioso o nervioso en el consultorio del proveedor de atención médica también puede afectar la presión arterial.
La edad, la altura, el peso y el sexo. La presión arterial es menor en los bebés que en los niños más grandes. Los niños más altos suelen tener la presión arterial más alta que los niños más bajos. Los niños obesos o con sobrepeso tienen más probabilidades de tener presión arterial alta. Y los varones suelen tener la presión arterial apenas más alta que la de las niñas.
Enfermedades o medicamentos. Podría deberse a una enfermedad del corazón o a una enfermedad de los riñones.
Dieta. La sal, los alimentos con gran contenido de sal (como las carnes de res envasadas), el alcohol y las bebidas con cafeína (como el café y los refrescos) pueden elevar la presión arterial.
Una lectura de presión arterial alta, no significa que su hijo tiene presión arterial alta. El proveedor de atención médica deberá verificar la presión arterial del niño en el transcurso de días o semanas. Si la presión arterial se mantiene elevada, puede ser un problema.
Cuando no se conoce la causa de la presión arterial alta, se llama presión arterial alta primaria. La presión arterial alta secundaria ocurre con las enfermedades o debido a ciertas elecciones en el estilo de vida.
Entre las siguientes, se incluyen las causas de la presión arterial alta en niños y adolescentes:
Enfermedad de los riñones y enfermedad del corazón
Medicamentos con receta, como los corticosteroides y las pastillas anticonceptivas
Drogas ilícitas, como la cocaína o la metanfetamina
Trastornos endocrinos, como la tiroides excesivamente activa (hipertiroidismo) y la diabetes
Causas de salud mental, como el estrés mental y la ansiedad
Los niños y los adolescentes tienen más probabilidades de tener presión arterial alta en los siguientes casos:
Sobrepeso
Tener antecedentes familiares de presión arterial alta o de enfermedades del corazón
Ser varón
Tener una madre que fumó durante el embarazo
Por lo general, la presión arterial alta no produce síntomas. Es por eso que, a menudo, se la llama "asesino silencioso". Suele detectarse en las consultas de rutina al proveedor de atención médica.
El proveedor de atención médica del niño le diagnosticará presión arterial alta después de controlar la presión arterial de su hijo. El proveedor controlará la presión arterial durante varios días o semanas y luego hará el diagnóstico. Es posible que el proveedor de atención médica del niño también haga lo siguiente:
Revisar la historia clínica del niño, lo que incluye la alimentación, el ejercicio, las actividades y la salud emocional
Revisar los antecedentes familiares
Hacerle una exploración física al niño
Puede ser útil tomar la presión arterial de la manera correcta en casa para averiguar si el niño tiene realmente presión arterial alta. En el control ambulatorio de la presión arterial, se usa un dispositivo que puede llevarse durante 24 horas. Este dispositivo toma muchas lecturas de la presión arterial y permite obtener valores más precisos de la presión arterial general.
Es posible que el proveedor del niño también le pida algunas pruebas. Por ejemplo:
Electrocardiograma (ECG) para revisar el ritmo cardíaco del niño
Ecocardiograma (eco), para verificar la anatomía y el funcionamiento del corazón de su hijo y para ver si hay algún estrechamiento de la aorta
Análisis de sangre
Análisis de orina
El tratamiento dependerá de los síntomas, de la edad y del estado de salud general de su hijo. También dependerá de la gravedad de la afección. Si el proveedor de atención médica del niño encontró una causa secundaria, como una enfermedad de los riñones, se tratará la enfermedad. Si el proveedor no encuentra una causa, el tratamiento implica hacer cambios en el estilo de vida. Esto implica seguir una dieta saludable para el corazón con las siguientes características:
Incluye muchas frutas y verduras, granos integrales y productos lácteos bajos en grasa o sin grasa
Tiene poco contenido de sal
Limita la cantidad de alimentos grasosos y dulces
Otros cambios en el estilo de vida pueden incluir los siguientes:
Perder peso
Más actividad física
Aprender a controlar las emociones y el estrés
Dejar de fumar o evitar hacerlo
Evitar el consumo de alcohol
Muchos niños y adolescentes logran reducir la presión arterial con cambios en el estilo de vida. Pero algunos niños necesitan medicamentos.
La presión arterial alta puede dañar los vasos sanguíneos y el corazón. Esto aumenta el riesgo de sufrir ataques al corazón y ataques cerebrales más adelante.
No siempre es posible prevenir la presión arterial alta. Pero elegir un estilo de vida saludable para el corazón puede reducir la probabilidad de desarrollar presión arterial alta. Ayude a su hijo a hacer lo siguiente:
Conservar un peso saludable
Comer alimentos saludables
Hacer actividad física todos los días
Evitar el tabaquismo
La Academia Estadounidense de Pediatría (AAP, por su sigla en inglés) recomienda hacer pruebas de detección de la presión arterial a los niños a partir de los 3 años de edad en el control anual del niño sano. En todas las consultas de atención médica debe controlarse si el niño es obeso, si toma medicamentos que se sabe que aumentan la presión arterial, si tiene enfermedad de los riñones, diabetes o antecedentes de obstrucción del arco aórtico o coartación. La presión arterial normal en los niños depende del sexo, de la edad y de la altura.
Si tiene antecedentes familiares de presión arterial alta o de enfermedades del corazón, infórmeselo al proveedor del niño. Y si su hijo tiene sobrepeso, asegúrese de hablar con el proveedor sobre formas de perder peso.
Tener presión arterial alta quiere decir que la presión dentro de las arterias es demasiado alta. Esto puede dañar las arterias y hacer que el corazón se esfuerce más.
A menudo, no se conoce la causa de la presión arterial alta. Algunas afecciones de la salud y medicamentos pueden causar presión arterial alta.
La presión arterial cambia. El proveedor del niño debe controlarle la presión arterial a lo largo de varios días o semanas para diagnosticar presión arterial alta.
Los cambios en el estilo de vida, como perder peso, hacer ejercicio y comer de forma saludable, ayudan a reducir la presión arterial alta.
Consejos para ayudarlo a aprovechar al máximo la visita con el proveedor de atención médica de su hijo:
Tenga en claro la razón de la consulta y qué quiere que suceda.
Antes de la visita, anote las preguntas que quiere hacer.
En la visita, anote el nombre de los nuevos diagnósticos y de todo nuevo medicamento, tratamiento o prueba. También anote las instrucciones que el proveedor le da para el niño.
Sepa por qué se receta un tratamiento o un medicamento, y cómo esto ayudará a su hijo. Conozca los efectos secundarios.
Pregunte si la afección de su hijo se puede tratar de otra forma.
Sepa por qué se recomienda una prueba o un procedimiento y qué podrían significar los resultados.
Sepa qué esperar si su hijo no toma el medicamento o si no se realiza la prueba o el procedimiento.
Si su hijo tiene una cita de seguimiento, anote la fecha, la hora y el objetivo de la visita.
Sepa cómo comunicarse con el proveedor fuera del horario de atención. Esto es importante en caso de que su hijo se enferme y usted tenga preguntas o necesite ayuda.